En los últimos meses, el nombre de Emiliano Aguilar ha vuelto a los titulares. Hijo mayor de Pepe Aguilar, el rapero ha protagonizado una serie de declaraciones que han destapado no solo su distanciamiento con el patriarca de la dinastía Aguilar, sino también las tensiones que mantiene con sus hermanos Ángela, Leonardo y Aneliz Aguilar. Su historia, marcada por diferencias familiares, ausencia paterna y polémicas en redes sociales, ha despertado dudas sobre qué tan unidos están realmente los Aguilar fuera del escenario.
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Emiliano Aguilar y la herida con Pepe Aguilar
Desde hace años, la relación entre Emiliano y su padre ha sido complicada. Criado principalmente por su madre, Carmen Treviño, en Tijuana, el joven creció lejos de la convivencia cotidiana con Pepe Aguilar. Esa distancia, sumada a conflictos personales y a la falta de comunicación, terminó fracturando el vínculo.
En entrevistas recientes, Emiliano no ha dudado en exponer la tensión con su papá. Incluso aclaró el motivo por el que Pepe aún no conoce a su nieta, Ángela, nacida en 2022:“Mira, por más enojados que estemos, si mi papá me habla y me dice: ‘¿Sabes qué? Quiero conocer a mi nieta, ¿me la puedes traer?’, con mucho gusto. A lo mejor no voy yo, ¿sí me explico? Pero la llevo. No te voy a negar que la veas, ¿sí me explico? Pero que salga de él, pues”, expresó el rapero.
Pepe, por su parte, ha reconocido públicamente que la distancia ha sido dolorosa. En entrevista con Pati Chapoy, el intérprete confesó: “No conozco a la niña porque no me habla el güey”.
¿Cómo es su relación con Ángela, Leonardo y Aneliz Aguilar?
Más allá del conflicto con su padre, la atención también se ha centrado en cómo se lleva Emiliano con sus hermanos. En diferentes entrevistas, ha dejado claro que sus caminos son completamente distintos, al grado de no sentirse identificado con ellos: “Sí, tengo su carácter (de mi papá), sí tengo su esencia, de mi abuelo, pero no somos lo mismo yo y mi papá. No somos, ni somos lo mismo yo y mis hermanos. Para nada. Somos 180 grados diferentes, completamente a la vuelta. No somos iguales”, declaró.
El año pasado, Emiliano reveló que no fue invitado a la boda de su hermana Ángela Aguilar con Christian Nodal, celebrada el 24 de julio de 2024 en la Hacienda San Gabriel, Morelos. En entrevista, confesó: “Un día yo andaba acá por Instagram y digo ‘ah cabrón se casó mi hermana’ me llegó de sorpresa, dije: ‘que cu***s’ que no me dijeron nada. Pon tu que no hubiera ido, pues estoy trabajando acá, pero al menos el detalle, no sé si me explico”.
La situación se volvió aún más comentada cuando Emiliano vio que su padre, Pepe Aguilar, compartió fotos del evento en Instagram, y él respondió con un irónico “GPI” (gracias por invitar), provocando revuelo entre los seguidores y reflejando las tensiones existentes dentro de la familia Aguilar.
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La tensión más reciente ocurrió cuando, a través de redes sociales, respondió a una publicación que la familia Aguilar compartió desde la cuenta de su mascota y que él interpretó como una burla hacia su persona. Su respuesta fue contundente:“¿Por qué borraron la foto del perro insultándome? Que pinches pocos huevos. Definitivamente somos de diferente madera”.
Aunque después se emitió una disculpa desde la misma cuenta, Emiliano no cedió y reafirmó que no existe posibilidad de reconciliación con sus hermanos ni con su padre: “Tengo su carácter, sí tengo su esencia, de mi abuelo y todo, pero no somos los mismo, yo y mi papá, no somos, ni seremos los mismos yo y mis hermanos, para nada. Somos 180 (grados), completamente la vuelta, no somos iguales”.
El distanciamiento entre Emiliano y los Aguilar parece ir más allá de un simple pleito familiar. A lo largo de los últimos años, el rapero ha mostrado públicamente su desacuerdo con la forma en la que funciona la dinastía, incluso llegando a lanzarse contra Ángela Aguilar y su actual esposo, Christian Nodal.