La presunta separación entre Gabriel Soto e Irina Baeva sigue dando de qué hablar pese a que ellos se han encargado de desmentirlos. Ahora una nueva hipótesis ha surgido con respecto a su convivencia.
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Aunque Irina y Gabriel se dejaron ver juntos luego de la llegada de la actriz a México, los medios siguen confirmando que ha sido un espejismo su encuentro, pues no están juntos y es un contrato con reconocida marca de zapatos el que les impide hacer pública su ruptura.
Incluso el viaje de Irina a New York se llegó a rumorar que había encontrado el amor en un actor de Hollywood.
La ayuda de Sara Corrales a Gabriel Soto ‘Mi camino es amarte’ ya
Luego de conocerse su presunta separación, se especuló que Sara Corrales mantenía un romance con Gabriel, pero ella misma se encargó de desmentir la información.
Ante la situación que vive el protagonista de la telenovela Mi Camino es Amarte, le pidió ayuda a su ex esposa Geraldine Bazán para buscar un nuevo hogar y también fue Corrales quien le tendió una mano al momento de sacar sus pertenencias del lugar donde vivía con Baeva.
Según el reportero Gabriel Cuevas comentó en el programa Fórmula Dominical con Flor Rubio que Sara le ayudó con el cambio y hasta el asistente de ella se presentó para auxiliarlo.
El fin de su romance se dio hace cuatro meses atrás cuando el actor descubrió que su entonces pareja se mensajeaba con su ex, Emmanuel Palomares.
“Gabriel comenzó a perder confianza en la rusa”, aseguró Cuevas. “(Las conversaciones) llevaron a Soto a tomar una decisión que tiempo atrás venía pensando, debido a que él llegó a sentir que la empatía, los temas de conversación con la pareja, la superficialidad y el poco interés que ella (Irina Baeva) tenía con sus hijas, lo estaban llevando a tener una crisis antes de la boda”, dijo Cuevas.
Incluso la relación no habría terminado de la mejor manera pues ella lo habría agredido en varias oportunidades.
“El actor fue agredido en varias ocasiones por la rusa cuando éste le dijo que ya no quería estar a su lado”, sostuvo.