Adele perdió más de 45 kilos en los últimos años producto de la constancia y disciplina, pero desea ser valorada por su talento y capacidad en vez de su renovada figura.
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Precisamente esta última ha sido el centro de la conversación en torno a la cantante. La dieta que siguió, los ejercicios que hizo, su inspiración para perder peso... creando una narrativa superficial de la que no desea ser parte.
“No estoy sorprendida ni desconcertada por eso, porque mi cuerpo ha sido cosificado durante toda mi carrera. O soy muy gorda, o soy muy delgada. O soy hot o no; lo que sea”, explicó la artista en una charla con Oprah.
Adele recordó que el valor de las mujeres no está en su físico
“Nunca admiré a alguien por su cuerpo. Nunca admiré a alguien porque tuviera el mismo estilo o pelo que yo. Me siento mal que alguien se haya sentido mal por esto. Pero no es mi trabajo”, agregó la británica de 33 años.
En la misma conversación hizo énfasis en que hay que centrar más la atención en el talento, inteligencia, capacidad y profesionalismo de la mujer, más que en su imagen, pues de esa manera se empiezan a derribar los estándares de belleza.
“Era positiva con mi cuerpo antes, soy positiva con mi cuerpo ahora. Pero no es mi trabajo validar cómo la gente se siente con sus cuerpos”, recordó.
[ Adele tiene el vestido negro que toda mujer curvy y poderosa necesitaOpens in new window ]
No obstante, la intérprete de Someone like you no ha estado exenta de críticas en medio de su transformación por “caer en los estereotipos y la presión de la industria”.
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“Entiendo por qué los impacta. Entiendo por qué algunas mujeres se sienten especialmente heridas. Visualmente, representaba a muchas mujeres. Pero sigo siendo la misma persona. Las conversaciones más brutales eran las que otra mujeres hacían sobre mi cuerpo”, dijo meses atrás a Vogue.
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