El pasado 13 de junio Netflix estrenó una nueva serie llamada «Historia de un crimen: La búsqueda», basada en el caso de la desaparición de la niña Paulette Gebara Farah en México y que ha traído una gran ola de críticas con ella.
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Entre distintas voces sonantes que alaban la producción y otras que intentan destruirla, intenta visibilizar con toques de ficción uno de los casos que sacudió al país azteca, por lo que se trata de un tema más que sensible.
Paulette fue una niña mexicana de cuatro años con discapacidad que presuntamente desapareció de su casa y luego fue hallada muerta en su propia habitación en 2010, en medio de una gran cobertura de los medios y campañas para encontrarla.
Ahora, miles de personas aseguran que la producción es un irrespeto a la memoria de la pequeña puesto que también tiene pequeños toques de humor, sin embargo, está siendo un éxito en cuando a reproducciones.
Al rescate de la miniserie
Por este motivo, los protagonistas de la serie han salido en defensa del proyecto para aclararle a los detractores el verdadero sentido que tiene la pieza audiovisual.
El actor Alejandro Calva explicó a Quien que «quien no conoce la historia está condenado a repetirla», por lo que la producción busca revisar «en qué momento estábamos antes y en cuál estamos ahora», ya que el manejo de la investigación fue polémico.
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«(Fue) Un proceso que debió haber sido dirigido hacía el campo de lo legal y la justicia, se volvió uno mediático, con verdades a medias», explicó añadiendo que «sí hay mucha desinformación y un sesgo político personal y pasional» en las críticas que reciben.
«La miniserie es una pieza más artística, que de alguna manera nos invita a reflexionar», añadió, motivando a que cada quien saque sus propias conclusiones aunque aclara que no es una recreación exacta de lo sucedido, avisó al mismo medio.
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