Fue gracias a Luis Miguel que Thalía vivió uno de los momentos más incómodos que le hayan tocado protagonizar a lo largo de su carrera hace casi dos décadas atrás. Corría el año 1993 cuando Luis Miguel le hizo pasar un bochornoso momento al humillarla delante de un nutrido público que pronto notó la penosa situación en la que se encontraba la cantante. La cantante salió al escenario a entregarle un premio y pero él se encargó de dejarle muy claro que no quería saber nada ella.
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Lo anterior sucedió durante el Festival de Acapulco. Raúl Velasco se encargó de anunciar a Thalía y pedirle su presencia en el escenario: “Y para un cuero, otro cuero que le venga a entregar la medalla, ni más ni menos que Thalía”, fueron las palabras que usó para presentarla sin imaginar lo que vendría minutos después. El intérprete de “La incondicional” intentó disimular su molestia, pero su cara dijo más que mil palabras.
Luis Miguel humilló a Thalía y el momento quedó para la posteridad en video
Luis Miguel se mostró molesto al escuchar las palabras de la esposa de Tommy Mottola “Es un orgullo ponerte la medalla, quiero decirte en nombre de todos los mexicanos que eres nuestro rey, nuestro sol, estamos muy orgullosos de tenerte y te amamos”, al mismo tiempo que comenzaba a abrazarlo y a acercase al máximo a ‘El Sol’, pero el lenguaje corporal del cantante mostraba a leguas que su indignación iba en aumento.
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La actitud tan melosa de Thalía provocaría que incluso Raul Velasco llegara a decir “yo me voy, aquí sobro”, pero lo que más destacó fueron las señas de Luis Miguel que parecían implorarle que no lo hiciera. Ella no paraba de decirle cosas al padre de Michelle Salas mientras que él no hacía más que mirar al fallecido Raúl Velasco intentando hacerle entender que la sacara.
Thalía terminó por entender la indirecta muy directa de Luis Miguel dejándolo solo para que pudiera continuar con su espectáculo. Incluso, “El Sol” la despidió muy feliz y contento de que por fin se retirara del escenario.