Aunque no suele compartir demasiados momentos de su vida personal, Martín Cárcamo hizo una excepción durante el fin de semana y publicó una adorable fotografía junto a su hijo Mariano, a quien adoptó en el año 2012.
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En el registro, aparece acostado junto al menor, quien se encuentra durmiendo sobre uno de sus brazos. «Muy buenos días!!! Que sea un gran sábado para todos!! Los que puedan… aprovechen de descansar», fue el mensaje con que acompañó la imagen, que inmediatamente provocó reacciones por parte de sus seguidores.
La mayoría de los comentarios apuntaron a lo grande que está el pequeño, cuyas apariciones en el perfil del animador han sido muy esporádicas. «Hermosa foto cargada de amor!!!!», «Buen día. Y tu hijo cada día mas grande y bello», y «Qué bello y grande está tu hijo», fueron parte de las reacciones.
A estas palabras se sumaron mensajes de figuras como María Luisa Godoy, Michelle Adam, Benjamín Vicuña y Mauricio Pinilla. Betsy Camino y Hugo Valencia también comentaron la fotografía. Y mientras que la cubana se sorprendió por lo crecido que está, el periodista Hugo Valencia señaló: «foto más tierna o foto más tierna?».
Recordemos que Martín Cárcamo habló sobre el proceso de adopción, durante una dinámica en el programa Bienvenidos. En dicha ocasión, lo llevaron hasta el estudio de Vértigo, en donde le hicieron la conocida «pregunta del pueblo». «¿Cuál fue tu motivación para adoptar un niño cuando ya tenías dos hijos y cuál fue el sentimiento una vez que terminaste todos los trámites en Haití y llegaste al avión después de un largo proceso?», fue el planteamiento.
Inicialmente, confesó que la motivación para haber adoptado a su hijo tenía que ver con «un acto de amor profundo». «Fue algo orgánico, hubo una conversación profunda y sentimos que teníamos la capacidad para amar a un tercer hijo», señaló. «Fue una experiencia muy larga, muy dura, por la situación que se vive en Haití, y porque aquí hay mucha inexperiencia y no hay información, pero con un final realmente extraordinario», agregó.
También explicó que «fue un proceso de casi tres años. Tú partes la adopción antes que tu hijo nazca, después lo conoces, después vas y vienes. Hasta que no terminas, el proceso es muy difícil. Me acuerdo cuando pasamos la policía haitiana y nos subimos al avión. Se había terminado el proceso, llegamos a Chile y fue increíble».