La privacidad siempre ha sido una preocupación de Meghan Markle y el príncipe Harry, sobre todo ahora que tienen al pequeño Archie en casa.
Es por eso que las autoridades de Windsor Estate instalaron una nueva valla en las afueras de la casa de Harry y Meghan después de que surgieran preocupaciones de seguridad a principios de este año.
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El domicilio de los duques de Sussex y su hijo Archie está a menos de una milla del castillo de Windsor pero los lugareños han notado los cambios en el exterior de la casa, reseñó Daily Mail.
La extrema seguridad en la casa de Meghan Markle y el príncipe Harry
La cerca habría costado alrededor de 12 mil euros y se encuentra detrás de una cerca de madera tradicional que había rodeado la propiedad y elimina por completo las vistas del jardín de la casa desde el exterior.
La seguridad es estricta alrededor de la propiedad ya que la pareja se encuentra actualmente en un descanso de seis semanas de los deberes reales.
Crown Estate ha presentado numerosas solicitudes de planificación al consejo local sobre «obras de paisajismo externas» en la propiedad, aunque los documentos de respaldo no se han hecho públicos ya que «contienen información confidencial».
Y la seguridad no sólo abarca a las nuevas vallas, también han instalado más cámaras de seguridad a las afueras de la casa para evitar cualquier tipo de intrusión de personas no deseadas o paparazzis.
Antes de mudarse a Frogmore House, se gastaron más de 2 millones de euros en la renovación del hogar de Meghan Markle y el príncipe Harry, lo que generó críticas en el entorno político de Reino Unido.