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Salma Hayek presume su cuerpazo en traje de baño a sus 52 años y compartimos sus secretos de belleza

Prefiere los productos naturales para el cuidado de su piel

Por Daniela Bracho

Salma Hayek es una de las actrices mexicanas con mayor proyección en Hollywood y no es para menos, con su indiscutible talento y carisma ha logrado un puesto en la industria del cine anglófono.

Fue la primera mexicana en ser nominada como actriz principal a un Premio Oscar, por su papel de Frida en la película Frida Kahlo, estrenada en 2002, actuación por la que también fue nominada  a los Premios BAFTA y al Globo de Oro.

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Desde la década de los 90 comenzó a actuar en telenovelas mexicanas y hoy, a sus 52 años, Salma Hayek parece estar viviendo el momento más pleno de su vida: una carrera exitosa, un matrimonio feliz con su esposo François-Henri Pinault y su hija Valentina Paloma.

Salma Hayek en traje de baño

Ahora en verano, la actriz se tomó unas vacaciones en la playa, su destino favorito, compartiendo varias imágenes de su travesía en Instagram.

La mayoría de sus seguidores alabó su cuerpazo en traje de baño, conservándose muy bien y hasta mejor que algunas mujeres menores que ella.

Pero es que Hayek tiene unos secretos de belleza que la ayudan a verse hermosa y de forma saludable, sin mecanismos que puedan atentar contra su salud.

No te limpies el rostro en exceso. “Nunca limpio mi piel en la mañana”, le dijo al NYT citado por Allure. “Mi abuela me enseñó que por la noche tu piel repone todas las cosas que perdiste durante el día. Además, si me limpio muy bien por la noche, ¿por qué estaría sucio cuando me despierte?”.

Productos naturales. Por las mañanas, se rocía agua de rosas en la cara porque “es muy suave y despierta la piel” antes de aplicar la crema hidratante. “Por la noche me quito el maquillaje con aceite de coco. Luego uso agua de rosas para eliminar los residuos”, dijo.

Exfolia tu piel pero solo lo justo. “Exfoliarte mucho puede hacerte lucir bien a corto plazo, pero no creo que a largo plazo. Veo muchas mujeres en Los Ángeles que se han exfoliado tanto que se ven brillantes”, dijo. “Usaré una mezcla de sueros y aceites dependiendo de mi piel ese día”.

Y la filosofía de vida de Salma: “Una de las razones por las que no me tiño el cabello es porque no tengo la paciencia para sentarme. No quiero gastar lo que queda de mi juventud fingiendo que soy más joven y luego no disfrutar de la vida”.

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