El matrimonio entre Camilla Parker y el príncipe Carlos tiene una escandalosa historia detrás, ya que nació a partir de relaciones infieles según las revelaciones de la princesa Diana, una situación que le causó demasiada incomodidad a la reina Isabel II, quien en un principio se rehusaba a acepar a la nueva pareja de su hijo.
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Todos los escándalos y el rechazo del pueblo británico hacia Camilla Parker empeoraron cuando Diana falleció trágicamente en un accidente. No solo a los seguidores de la corona les costó aceptar la nueva relación real.
La reina Isabel tuvo que aceptar a Camilla Parker
Los detalles del matrimonio de Diana y Carlos dejaron a todos impactados, pues durante la relación la princesa sufrió de depresión, bulimia y atravesó difíciles momento al enterarse de la infidelidad de su esposo.
La reina tuvo que trabajar mucho para superar el escándalo más grande de la historia de la corona británica y para perdonar a la causante de todo: Camilla Parker.
La aceptación de la reina Isabel jugó un papel tan fundamental que, aunque la relación se hizo pública en 1999 la boda llegó a finales de 2005.
Hasta hoy en día Camilla es rechazada por gran parte del público de la realeza; sin embargo, es notable cómo ya ha sido incluida en los protocolos, eventos importantes y celebraciones de la corona.
