Kim Kardashian ha ayudado a liberar a hasta 17 reclusos al financiar en secreto una campaña de justicia penal.
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La estrella de reality comenzó sus ofertas de justicia social al pedirle al presidente Donald Trump la liberación de la abuela de Tennessee, Alice Marie Johnson, en junio del año pasado.
Desde que Trump le perdonó a la mujer de 63 años después de conocer a Kim en la Casa Blanca, se unió a las campañas para liberar a otros prisioneros.
Kim se unió a la abogada Brittany K Barnett y ha financiado en secreto el Proyecto Buried Alive, que ha ayudado a liberar a 17 reclusos que recibieron sentencias de cárcel enormes por delitos de drogas de bajo nivel como parte de su proyecto 90 Días de Libertad.
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Algunas de las campañas de Kim han sido bien publicitadas, como la ex esclava sexual Cyntoia Brown, Jeffrey Stringer y Johnson, quienes pasaron 21 años en prisión por un delito no violento relacionado con las drogas.
La estrella de Keeping Up With The Kardashians se ha registrado en el Colegio de Abogados del Estado de California para estudiar derecho y convertirse en un abogado de pleno derecho.
Kim también debe completar 60 créditos universitarios y luego trabajar como aprendiz en una firma de abogados en San Francisco con la intención de tomar el Examen de Abogacía en 2022.
