La legendaria actriz de Broadway y de Hollywood Carol Channing, falleció este martes 15 de enero en horas de la mañana, así lo informó su publicista a la revista Broadway World. Tenía 97 años.
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Nacidos en Seattle en 1921, los padres de Channing eran científicos. Ella recuerda que tuvo su primera visión de backstage entregando copias de The Christian Science Monitor a las personas en las salas de teatro y los cines.
«Se me ocurrió que estaba mirando el escenario y el backstage de una catedral, un templo, una mezquita, una iglesia madre», escribió Channing en sus memorias Just Lucky, I Guess. «Sé que estoy usando palabras adultas para describir los sentimientos de un niño, pero no sé de qué otra manera decirle esta simple reacción de un niño a un lugar santo».
La conexión casi religiosa de Channing con su audiencia le dio una cantidad asombrosa de energía, y se irritó con aquellos que intentaron disminuir la importancia del teatro en la vida de las personas.
«El teatro en vivo es algo que no puede morir porque estamos trabajando en su metabolismo», dijo Channing. «Algunas noches son hiperactivas, algunas noches son lentas, algunas noches tienen sueño, tenemos que cuidarlos, tenemos que encontrar la manera de comunicarnos con ellos… Es algo eléctrico para el artista. Es como enchufarme en la pared».
El primer gran papel de Channing también fue su primera gran oportunidad como Lorelei Lee en la producción original de Broadway de Gentlemen Prefer Blondes, en 1949. Pero el papel con el que siempre se identificará a Channing es Dolly.
Fue este papel en Hello, Dolly! que Channing amaba más porque era la vida afirmando en todos los sentidos. Ella tenía un gran respeto por el creador del programa, Thornton Wilder, y se sintió profundamente conmovida por el ascenso gradual del personaje en el más optimista de los espectáculos de Broadway.