1.- La reina Isabel apenas tenía 13 años cuando se vio deslumbrada por Felipe, un cadete de Marina rubio de 18 años, miembro de la familia real griega que tuvo que huir del país.
PUBLICIDAD
2.- Felipe renunció a su nacionalidad, a sus apellidos paternos y a su carrera militar para poder contraer nupcias con la reina Isabel.
3.- Ella lo esperó varios años y mientras solamente se comunicaban a través de correspondencia.
4.- Los primeros cinco años se describen como los más felices de su matrimonio. Aunque en un inicio Felipe no era tan querido dado que lo percibían como un intruso.
5.- A Felipe le costó mucho trabajo regirse bajo la personalidad de Isabel y ser un consorte simplemente. Más porque tuvo que renunciar a su carrera cuando su esposa tomó las responsabilidades de su padre.
«Se aburría terriblemente con todas las obligaciones de la realeza, todos esos compromisos formales y apretones de manos… No era lo suyo», recordó Michael Parker secretario particular de Felipe.
6.- El rey Felipe tuvo varias infidelidades en sus viajes y reuniones. Sus amigos siempre intentaron cubrir sus huellas.
«La propia biógrafa de Isabell II siempre relaciona a Felipe con mujeres más jóvenes que él. Entre sus infidelidades más famosas se incluyen princesas, duquesas, condesas, y muchas otras damas sin título».
7.- Felipe era muy temperamental y estos se vio aumentado cuando le fueron quitando privilegios por su posición de consorte.
«A la reina a veces hasta le divierten las pataletas de su marido. En otras ocasiones se irrita y le contesta secamente: «Haz el favor de callarte», publicó el mundo.es
8.- Aunque los años, según amigos cercanos, lo han dulcificado. La reina siempre le ha tenido mucha paciencia, aunque ya no teme ponerle un alto.
9.- Pero sobre todo esta pareja aún se ama, se comprende y aceptan sus dificultades. No fue una pareja de matrimonio arreglado o por presión social.
10.- Ya van a cumplir 71 años de casados.