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El qué y el cómo de un Primer. La columna de Sole Donoso

No es un producto que pueda considerarse nuevo, pero sí uno que genera muchas dudas, al que rodea un gran desconocimiento y, para mí, uno de los básicos en el cosmetiquero.

 

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No es un producto que pueda considerarse nuevo, pero sí uno que genera muchas dudas, al que rodea un gran desconocimiento y, para mí, uno de los básicos en el cosmetiquero.

El Primer (se pronuncia praimer) se aplica en tu rostro después de tus productos hidratantes y previo al maquillaje, logrando una mejor superficie para aplicar la base u otros producto. Además de lograr una mayor adherencia y duración de estos, muchos ayudan a la protección de la piel, incorporando a sus fórmula protección solar, hidratantes, etcétera.

Hay Primers (o prebases) para diferentes áreas del rostro y que cumplen diferentes funciones.
Para piel normal encontramos una gran variedad. Están los clásicos que ayudan a controlar brillo, minimizan poros y líneas de expresión (sí, ¡parece magia!); muy fáciles de aplicar y libres de color dan una apariencia opaca duradera y, en muchos casos, tan eficaces que puedes utilizarlo como producto único, sin una base posterior. Acá entre mis favoritos encontramos el Under Make Up Base, de Inglot, y el clásico The Porefessional Primer, de Benefit.

Otro de los Primers de rostro muy útiles –y que se conocen poco– son aquellos específicos para pieles enrojecidas o con rosácea que, por su tonalidad verde (les juro que no las dejará como Hulk), ayudan a mantener a raya el rojo, por lo que no es necesario una capa tan gruesa de maquillaje para emparejar. Así se logra un aspecto más natural y una solución para tan incómoda condición; eso sí, les recomiendo siempre primero probar y testear que los productos no las irriten ni les produzcan alergias, pues este tipo de pieles generalmente son mucho más sensibles. En esta área mis favoritos lamentablemente no los venden en Chile, como el de Smashbox o Makeup for Ever, pero encontré una muy buena alternativa en las cremas CC Control, de M.A.C., de su línea Prep and Prime.

Otra área de importancia a la hora de aplicar estos productos son los párpados, pues a todas nos ha sucedido que después de un rato la bella sombra que nos pusimos se pegotea en un horrible pliegue o, peor, queda esparcida bajo los ojos, dándonos un aspecto ojeroso. Para evitar esto y hacernos la tarea más sencilla a la hora de maquillar están los Primer de ojo, que alisan, fijan y en ocasiones emparejan el tono del párpado, para que el color resalte mucho más. Acá destaca sin duda el Eyeshadow Primer Potion, de Urban Decay, que hace poco –por fortuna– aterrizó en Chile. Esparce sólo una pequeña cantidad con los dedos por el párpado; te asegura un maquillaje inamovible, realmente amado.

Y así también existen para cada área del rostro, labios, ojeras, pestañas; sólo es cosa de averiguar y definir tus necesidades, y atreverte a utilizarlos. Creo que no se arrepentirán.

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