El 5 de diciembre de 1901 nació Walt Disney, el productor, guionista y animador estadounidense que inventó a Mickey Mouse (quizá el dibujo de animación más famoso del mundo).
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Desde entonces han pasado décadas. Mickey y Walt son hoy iconos de cultura popular. Las princesas Disney están por todos lados y la productora que lleva el mismo cosecha dólares por montones.
Definido a veces como “solitario, paranoico, agresivo y megalómano” o como “el príncipe negro de Hollywood“, la obra de Walt sigue encantando a una generación tras otra en todo el mundo.
Aprovecho el día para agredecer a Disney su versión de Peter Pan (1953), una de mis películas favoritas de siempre, y para recordar algunas de sus frases memorables.
Hay muchísimas, pero elegí sólo 21, más pensando en las que sí me gustan que en un número en particular.

- Las ideas proceden de la curiosidad.
- El dinero es algo que entiendo vagamente y pienso en él sólo cuando no lo tengo para financiar mis proyectos.
- Hacer lo imposible es una forma de diversión.
- Mickey Mouse salió de mi mente en una libreta de dibujo, en un tren de Manhattan a Hollywood, en un momento en que la empresa, de mi hermano Roy y mía, estaba en el punto más bajo y el desastre parecía a la vuelta de la esquina.
- Los adultos son sólo niños que crecieron.
- La forma de empezar es dejar de hablar y hacer las cosas.
- Para crear fantasía, primero debemos entender la realidad.
- Sólo espero nunca perder de vista algo: todo comenzó con un ratón.
- Disneyland nunca estará terminada, seguirá existiendo mientras exista la imaginación.
- Nunca pude convencer a los inversionistas de que Disneyland era viable, porque los sueños tienen poca garantía.
- Amo más a Mickey Mouse que a cualquier mujer que haya conocido.
- Si puedes soñarlo, puedes hacerlo.
- No estamos tratando de entretener a los críticos. Me arriesgaré y lo intentaré con el público.
- Son muchos los corazones y las manos que contribuyen al éxito de una persona.
- La vida está compuesta de luces y sombras, fingir que no hay sombras sería hipócrita.
- Supongo que mi fórmula podría ser: sueña, diversifícate y nunca pierdas los detalles.
- Nunca he llamado a mi trabajo “arte”: es parte del mundo del espectáculo, el negocio de la construcción de entretenimiento.
- Siempre me gusta ver el lado optimista de la vida, pero soy lo suficientemente realista para saber que la vida es un asunto complejo.
- No me puedo estar quieto. Debo explorar y experimentar. Nunca estoy satisfecho con mi trabajo. Me molestan las limitaciones de mi propia imaginación.
- Ten una buena idea y apégate a ella. Persíguela y trabájala hasta que la hagas realidad, y hazlo bien.
- Es muy divertido hacer que suceda lo imposible.