Ella es la dueña de una voz incomparable, una voz que se tambalea entre lo masculino y lo femenino, entre lo rasposo y la elegancia que une al blues en un solo género y lo hace más genuino. El blues de Koko Taylor es aquel con el que se baila, se ríe, se conversa y se llora.
Al escuchar a Koko Taylor por primera vez los pelos se ponen de punta y el oído se obsesiona con su voz, su ritmo y es imposible dejar de oírla un buen rato.
Con “I’m a Woman” todo cambia, realmente uno termina enamorándose de su música.
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Cora Walton, nació en 1964 en una granja de Tennessee, en donde comenzaron a apodarla Koko por su gusto por el chocolate. Desde niña tuvo difíciles momentos, a los 11 años quedó huérfana junto a sus hermanos quienes cantaban en la granja para pasar el tiempo.
Comenzó a cantar en clubes nocturnos de Chicago. Allí fue donde Willie Dixon la conoció y le consiguió un contrato con la compañía Chess.
Desde ahí en adelante comenzó su éxito, con el tema “Wang Dang Doodle” y con la compañía Alligator Records grabó 6 canciones que obtuvieron una gran acogida del público.
Influenciada por Big Mamma Thornton, Howling Wolf y fehaciente admiradora de Muddy Waters, Koko Taylor fue parte de la casta del Blues de Chicago. Llegando a ser vista por la crítica como “la mejor cantante de blues en el mundo entero”.
Fue galardonada 14 veces con el premio W.C. Handy Award y con el Grammy en 1984, además fue premiada como la “Leyenda del año” en 1993 y recibió la medalla Nacional de las Artes por su contribución a la música.
El cine y televisión tampoco le fueron ajenos. Actuó en “Wild at Heart” de David Linch, además se interpretó a sí misma en la serie “New York Undercover” y participó en la música de la película “Blues Brother 2000”.
Luego de su larga carrera falleció el 3 de junio del 2009.
Pero su voz quedó impregnada en la memoria del blues siendo influencia de Bonnie Tyler, Bonnie Raitt, Janis Joplin, entre otros. Taylor ha sido y será una fuente de inspiración para muchas mujeres que como ella han comenzado desde su más humilde experiencia, y que al descubrir su talento pueden llegar a ser las mejores. Como ella, una reina.