A Jay-Z no se le ocurrió nada mejor que llevar a cabo una particular “acción de arte”. El miércoles por la tarde el reconocido cantante estadounidense se armó de ganas y paciencia y cantó durante seis horas su nueva canción “Picasso Baby” en un exclusivo distrito de galerías de Chelsea en Nueva York. Así fue como los espectadores, invitados a través de mensajes de texto un día antes, escucharon hasta el hastío los versos dedicados al pintor: “I Want a Picasso in my Casa” se escuchaba una y otra y otra vez.
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La intervención artística (o como quieran llamarle) fue grabada como parte del video promocional de la canción de su nuevo álbum, Magna Carta Holy Grail. Durante el rodaje, Jay-Z estuvo acompañado por distintas personalidades como la artista Marina Abramovic, que hasta bailó con él; Jemima Kirke, protagonista de la serie Girls; el productor Judd Apatow e incluso Diana Wismaier, nieta de Picasso. Además, cientos de curiosos asistieron a su presentación, llegando a formar filas afuera del recinto para poder verlo.
Excentricidad, moda o arte, lo cierto es que el rapero logró captar la atención de los medios con su rap artístico, una tendencia que viene en ascenso en el mundo de la música, donde han descubierto lo positivo y atrayente que resulta vincular el arte, la moda y la música.
Compartimos un video filmado durante la presentación del cantante:
