Las mordidas de perros son un accidente frecuente y no sólo protagonizadas por rottweilers o pittbulls, pues un animal de cualquier raza puede atacar cuando se siente amenazado.
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¿Qué debemos hacer si un perro nos muerde o somos testigos de un incidente de este tipo? Según explica el Dr. Víctor Ticozzi, médico jefe de la Unidad de Urgencias de Clínica Avansalud, el primer punto a considerar es la vacunación obligatoria del afectado para prevenir la rabia.
«Pero además se trata de mordidas sucias. La boca del perro es como la del hombre en cuanto a cantidad de bacterias, por lo que las mordeduras siempre estarán infectadas», explica el profesional.
Otro punto importante es no cubrir la herida con un paño o papel mientras la persona herida es trasladada a la clínica, pues la alta concentración de gérmenes en la boca de los perros se prolifera más rápidamente cuando no hay oxígeno. «Si cubrimos la herida, ayudamos a que estas bacterias aumenten», resume el Dr. Ticozzi. Lo más recomendable entonces es lavar la zona con agua tibia y buscar ayuda médica.
La gravedad dependerá de si se trata de una lesión por apriete o incluye desgarro. En el primer caso, «son heridas que no tienen mayor importancia aparte del dolor que generan», dice el médico de Avansalud. «De todas maneras, hay que acudir a un recinto asistencial para recibir un calmante y se generará un hematoma de proporciones durante los días siguientes», agrega.
El problema mayor son las mordidas con desgarro, las que se producen cuando el animal muerde y tira, o bien, cuando muerde y la piel queda fija pero lesionada. «Eso depende de la raza y las peores son aquellas donde existe desgarro, pues eliminan la continuidad de la piel y generan infección. Son heridas que requieren limpieza, antibióticos, vacunas y el trabajo de un cirujano plástico para la reconstrucción», dice el Dr. Ticozzi.
Consejos para prevenir mordeduras
-Tener claro que los animales se comunican y se defienden de una manera diferente a los humanos, por lo que no conviene provocarlos.
-No dejar a los niños solos con las mascotas.
-No molestar al animal cuando esté comiendo o durmiendo.
-Si la mascota tuvo crías, no tocarlas ni manipularlas para evitar agresiones.
-Mantener al día el plan de vacunas.