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Las cuatro mejores plantas que se adaptan al estilo Zen

Las plantas influyen en tus pensamientos y sentimientos, además de ayudarte a conseguir la paz

Las cuatro mejores plantas que se adaptan al estilo Zen Pixabay

La decoración Zen estará muy de moda este 2021 y este es un estilo basado en el budismo que con su armonía y claridad, busca el bienestar para el cuerpo, espíritu y el alma.

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Dentro de la decoración centro en el interior de los hogares todas las piezas que forman parte del ambiente tiene la misión de calmar tu mente y relajarte al máximo.

Y uno de esos implementos dentro de la decoración Zen que no pueden faltar en el hogar son las plantas.

Las plantas de la tranquilidad

El principal objetivo de las plantas dentro de la decoración de interiores Zen es crear un espacio tranquilo e inspirador y que se vea bien sin vestir demasiado o sobrecargarlo.

Como recomendación te informamos que debes elegir las plantas que cuidadosamente deberás exhibir en tu hogar.

Ya que las verás todos los días, e influirá en tus pensamientos y sentimientos, además de ayudarte a conseguir la paz y tranquilidad que tanto necesitas en un mundo lleno de estrés y ansiedad.

Te presentamos las mejores plantas Zen:

Lucky Bambú

Esta planta es exótica, humilde de aspecto y sencilla en lo que respecta a sus cuidados.

El Lucky Bambú o bambú de la suerte es una raíz de origen oriental que ha cautivado al mundo occidental en los últimos años.

Se considera una planta que atrae la energía positiva. Además de ser altamente resistente, es una planta que crece incluso con poca luz aunque y hasta en los espacios iluminados.

Bonsái

El bonsái es usado para denominar todo árbol pequeño que es cultivado en un recipiente y es podado cuidadosamente con cierta frecuencia.

Es posible crear un bonsái a partir de casi cualquier especie de árbol o arbusto leñoso perenne que produzca ramas verdaderas y hacer que permanezca con dimensiones reducidas mediante confinamiento en maceta y podado de su fronda y raíces.

Según su tamaño, los bonsái se clasifican en: Shito o Keshitsubo (menor de 5 cm), Mame (de 5 a 15 cm de altura), Shohin (de 15 a 21 cm), Komono (de 21 a 40 cm), Chumono (de 40 a 80 cm) y Omono (a partir de 80 cm).

Echeveria

Una de las plantas zen más sencillas de cultivar. No demanda mucho riego pero sí mucha luminosidad, y no tenemos que preocuparnos por su sustrato.

Al ser una planta originaria de climas desérticos, no necesita nutrientes como pueden demandar otras plantas de climas húmedos.

Además, esta planta presenta una gran variedad de formas y colores. Su versatilidad la hace una de las más adecuadas para conseguir el ambiente zen que buscamos en el hogar.

Arce japonés

Otra de las plantas resistentes y a las condiciones extremas es el arce japonés, que se asemeja mucho a un bonsái.

Uno de los aspectos que más llama la atención del arce japonés es la forma de sus hojas, que son palmadas. Y, respecto a sus cuidados, debes considerar que no debería darle el sol directamente y es adecuado trasplantarlo cada dos años.

Elementos para un mini jardín zen

Los jardines zen son de procedencia oriental y están especialmente diseñados para la meditación. Son muy populares y comunes en los hogares ya que proporcionan armonía, serenidad, paz y tranquilidad.

Este tipo de jardines deben tener:

– Arena de granos suaves porque representa el agua del mar y es símbolo de pureza. Debes darle forma con un rastrillo para representar las ondulaciones.

– Piedras que son un elemento fundamental en los jardines zen porque representan los obstáculos a los que nos vamos a enfrentar en la vida.

– Plantas, preferiblemente de color verde, porque a través de este color se simboliza la vida.

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