Una buena forma de alegrar tus días con la próxima llegada del bebé es preparar su habitación, buscar que ese refugio de amor quede cómodo, seguro y perfecto para que el bebé se sienta feliz y crezca tranquilo y saludable.
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Sin embargo, hay ciertas pautas importantes que debes seguir para conseguir la habitación que tanto sueñas y en esta oportunidad de ofrecemos 5 pautas para lograrlo:
Reutilizar materiales
La llegada del bebé trae consigo una serie de gastos, así que es buen idea mirar en casa qué mobiliario puede ser pintado y decorado con temática infantil. Lo mejor es recurrir a los colores claros y crudos para suavizar la decoración. Recuerda que debes lijar los muebles antes de aplicar la pintura.
También puedes lucirte con unas bellas manualidades y crear guirnaldas, alfombras de trapillo para decorar, cojines tuneados con pintura, móviles para la cuna.
La seguridad es lo principal
En algún momento el niño podrá quedará solo en la habitación así que es importante que estén seguros y entre otras cosas debes tener seguros en los enchufes, protecciones en las esquinas de los muebles, seguros en las ventanas, topes para las puertas y cajones.
Las ventanas
Es importante que el que el cuarto cuente con unas ventanas bien aisladas, para que la temperatura interior esté lo más regulada posible y, además, no entre demasiado ruido de la calle, así el bebé se sentirá tranquilo.
Los textiles
Le darán el toque diferenciador a la habitación. Es mejor emplear unas de colores claros, que permitan el paso de la luz natural, ya que en un dormitorio de bebé no debemos abusar de la luz artificial.
La pintura
En cuanto a las paredes, durante los primeros años son adecuadas las tonalidades claras, suaves. Ya cuando vayan creciendo se pueden ir colocando colores más fuertes que les resultarán estimulantes. En cuanto al tipo de pintura, debemos emplear pinturas al agua, no tóxicas.