La última tendencia de belleza es el tatuaje de pezones o titooing, un tinte semipermanente aplicado sobre los pezones y la areola para que éstos parezcan más grandes o incluso más oscuros.
Todavía no son muchos los que conocen esta técnica, ya que hasta hace poco tiempo sólo tenía una aplicación quirúrgica sobre aquellas personas que habían sufrido un cáncer de mama.
En estos casos, la reconstrucción del pecho pasaba por poner implantes de silicona y teñir el área del pezón utilizando la técnica del tatuaje, lo que suponía un gran avance para las mujeres que había sufrido una masectomía.
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Esta técnica es originaria de Liverpool, donde ya hay más de 15 centros que ofrecen el tatuaje de pezones o titooing, por un coste aproximado de $1.600 dólares, prometiendo a sus clientes “unos pezones perfectos”.
Todavía no es un procedimiento muy extendido pero los expertos en este método confían en que se haga muy popular en poco tiempo.
¿Cómo se realiza un titooing?
Para hacer un tatuaje de pezón, se aplica anestesia local sobre la zona para adormecerla. Parece ser que el procedimiento es más doloroso en mujeres que se lo realizan con fines estéticos que aquellas que lo hacen con fines médicos.
Realizar un tatooing lleva aproximadamente dos horas. Después de la primera aplicación, se repite el procedimiento para restaurar el color perdido, ya que el tatuaje dura impreso en el pezón de 12 a 18 meses. Esto significa que no es permanente y quien quiera mantener el tono deberá realizarse estos retoques.