Jamickia
Jamickia comenzó con problemas de peso desde la edad de los 13 años; y aunque confiesa que nunca fue una niña delgada, en ese entonces fue cuando la ansiedad comenzó a controlar su peso.
Los cambios en su cuerpo se volvieron agentes controladores de su vida, algo que afectaba en su estilo de vida, y en su seguridad. “Me alejaba de los eventos sociales y siempre me preocupaba lo que pensaban los demás. Siempre me pongo en la parte posterior de las imágenes. Creo que mi confianza fluctuó a lo largo de los años y afectó mi relación y mi sustento”.
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El día que tomó la decisión
Decidió que necesitaba un cambio en su vida en el momento que no pudo ponerse el cinturón de seguridad en un vuelo. Ella tuvo que pedir ayuda a la azafata lo que le causó mucha vergüenza. Este fue el instante en el que decidió que requería hacer cambios en su vida.
Comenzó a implementar diversos entrenamientos en su casa, primero fueron ligeros y después comenzó a aumentar la intensidad de éstos. También empezó a cuidar más sus hábitos alimenticios, y aunque costó trabajo su constancia era férrea.
“Noté cambios realmente notables en 3 meses. Sin embargo, después de algunas semanas, comencé sentirse más llena de energía y menos fatigada”.
Los obstáculos de Jamickia
Por descuidase tanto tiempo, la diabetes se volvió parte de su vida. Sin embargo, la pérdida de peso y el ejercicio la han ayudado a reducir síntomas de ansiedad, y hasta los problemas de insulina. Agarró un gusto por correr, pero superar los antojos fue la parte más difícil en su día a día.
También pensó muchas veces en rendirse, pero la ropa nueva que se compraba, las fotos de antes y después, y el apoyo de su familiares la ayudaban a continuar su camino y cumplir sus metas.
Su anterior dieta
“Era una comedora emocional y de comodidad. Había sido adicta a la comida durante mucho tiempo. Yo solía comer alimentos fritos, azucarados y comida rápida. Esto era algo cotidiano para mí. Comía porciones grandes y comía por la noche. También tienes que tomar un postre con cada comida. Yo tomaba soda 3 veces al día”
Las ventajas de su esfuerzo
Jamickia puede correr sin perder el aliento, su fuerza física y emocional han crecido de manera impresionante. Antes cualquier esfuerzo físico le quitaba el aliento, pero ahora esto ha cambiado.
Los trucos que usó
- Masticaba chicle sin azúcar para sus antojos.
- Se murmuraba frases motivacionales durante los entrenamientos.
- Tomaba una fresa cada vez que tenía un antojo.