Son conocidos por todas nosotras como puntos negros, pero dermatológicamente son comedones. De acuerdo a Dermatología MX aparecen cuando se acumula sebo seco, piel muerta y bacterias que impiden que el sebo fluya quedándose en un lugar del cuerpo y formando brotes.
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Aunque es común que aparezcan en la adolescencia, también se hacen presentes en otras etapas de la vida. En el caso de las mujeres pueden llegar a aparecer durante el embarazo o los días previos a la menstruación debido a que la actividad hormonal incrementa, produciendo más grasa.
Cómo eliminarlos
Lo primero que debes tomar en cuenta es que apretarlos con los dedos o con la ayuda de cualquier otra cosa puede causar infecciones y que el tamaño del punto negro aumente. Así que no lo hagas.
Puedes utilizar algún producto para quitar los puntos negros, recuerda que este debe estar dermatológicamente probado, y debe ser de acuerdo a tu tipo de piel. Los parches para eliminarlos ofrecen una solución temporal debido a que sólo remueven la parte superior y es probable que días después los puntos negros vuelvan a aparecer.
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Siempre lava tu rostro. Este es uno de los puntos más importantes, la correcta limpieza de tu cara tendrá beneficios a mediano plazo. La aparición de los puntos negro se debe a que hay un exceso de grasa. Si lavas tu cara por las noches, con un producto para piel grasa y te desmaquillas de manera adecuada, estarás un paso adelante de los molestos puntos negros.
Remedios caseros
En la actualidad hay varias recetas de mascarillas cuya base principal es la sal de grano. Puedes mezclar agua y sal para hacer un exfoliante ligero. Si mezclas la sal con leche obtendrás una mascarilla un poco más espesa, ideal si tu cutis no es tan graso.
La grenetina es otro de los ingredientes que puedes utilizar para hacer una mascarilla ligera. Deberás mezclar la grenetina con un poco de agua para crear una pasta, misma que te colocarás en la zona en la que aparecieron los puntos negros. Una vez seca la retirarás y verás cómo los puntos desaparecen.
Otra de las cosas que puedes hacer es poner avena natural en un procesador de alimentos hasta que quede una especie de harina, mézclala con agua o yogurt natural, dependiendo de lo graso de tu cutis. Ponla en forma circular con la ayuda de tus dedos, deja reposar 10 minutos y retira.
Recuerda, lo ideal es que visites a un dermatólogo, pues sólo él puede ayudarte a tratar problemas de la piel.