En el 2013, un hombre de nacionalidad francés, murió mientras mantenía relaciones sexuales con su amante. Aparentemente, e hecho habría ocurrido durante un viaje de negocios.
La familia del hombre lucharon por seis años en una corte de Francia, para exigir la indemnización correspondiente por ‘accidente laboral.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/GRAH2GPQPJEVFFYV3CRUYO3NJ4.jpg)
Motivos de la muerte
Según el informe médico entregado a la familia del francés, ‘Xavier’ habría sufrido un paro cardíaco, mientras mantenía relaciones sexuales.
Su cuerpo fue encontrado en la habitación de un hotel, con una mujer que habría conocido durante su viaje.
Empresa que realizará la indemnización
El hombre trabajaba como ingeniero en una compañía de construcción de ferrocarriles en Francia, de nombre ‘TSO’.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/GFJEYFF7KVDPBKCMOP27TOSX5E.jpg)
Después de haber sido demanda la empresa, esta aseguró que el hombre ‘no se encontraba realizando ninguna actividad relacionada con la compañía’.
Además, aseguraron que durante el viaje del empleado, ellos ‘no costearon el hotel en el que el hombre se habría muerto’.
Valor de la indemnización
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/TDCFG6FO6RGXPJRFTGZ3VEOILU.jpg)
El pasado 11 de septiembre, el tribunal francés determinó que ‘TSO’ deberá entregar a la familia del exánime el 80% del valor del salario que recibía mensualmente hasta la fecha de su jubilación.
Además, de un porcentaje extra, a la pensión mensual correspondiente, cuando un empleado sale de la compañía al cumplir su edad como funcionario.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/ZHEGFDPAUZDF5CBM4XNL3WWCFI.jpg)
A pesar de que no se pudo comprobar si el viaje de ‘Xavier’ fue por cuestiones de trabajo, el juez aseguró fue que todo habría ocurrido en días y horas laborales.
Por otro lado, lo que también habría ayudado en la resolución de este caso, es que ya que en el año 2016, el juez habría aducido que “un encuentro sexual es un acto de la vida normal como ducharse o comer”.