La caravana migrante de hondureños ha causado mucha conmoción en México, y ahora, Estados Unidos. Gran parte de la población se encuentra muy molesta por su forma de entrar, pero, sobretodo porque están recibiendo ayuda de las autoridades.
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Con argumentos tales como que son delincuentes, que van a robar las calles o quitar empleos han sido rechazados. Hubo un personaje que se robó la atención de todos y es llamada «La mujer hondureña que rechazó los frijoles». Su nombre es Miriam Celaya.
Todo fue sacado de contexto
Alguien recortó los 21 segundos donde aparece la madre de familia. La entrevista completa dura 4 minutos, pero fue sacada de contexto por los medios nacionales y se viralizó.
Todo quedó en estas palabras que indignó a los mexicanos:
“Mira lo que están dando: puros frijoles molidos, como si le estuvieran dando de comer a los chanchos. Y ni modo, hay que comernos esa comida porque si no, nos morimos del hambre”, dijo Miriam Celaya.
Quién es Miriam Celaya
La mujer viajó para encontrar ayuda médica para su hija Brittany de 11 años, porque es sordomuda. La hondureña ha recibido fuertes amenazas que atentan contra su vida y la de su familia.
Los mexicanos se han volcado en insultos a través de redes sociales demostrando su xenofobia. Aunque ella pidió disculpas durante una entrevista realizada por la BBC, y puso en contexto sus palabras.
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“Uno de los jóvenes que estaba repartiendo la comida, intentó forzar a mi hija a que comiera, cuando ella estaba enferma del estómago. Como ella no quería, él se quejó: ‘Estos putos hondureños no quieren comer frijoles’”.
Asimismo, pidió perdón con lágrimas en los ojos.
“Yo pido perdón a los mexicanos. Mil disculpas. Hemos caminado por todo México y hemos recibido mucha ayuda. Tengo todo que agradecerles. Yo he criado a mis hijos con muchos esfuerzos y dándoles frijoles y tortillas”.
Los frijoles también es un platillo típico para ellos.
¿Por qué hay tanto linchamiento?
Miriam dio la oportunidad perfecta para que los mexicanos pudieran expresar su odio y éste fuera admitido. Agarraron cualquier pretexto para hacerlo masivo y que su racismo no fuera mal admitido.
No es que nosotros honremos tampoco tanto a este platillo. Los propios mexicanos asocian los frijoles con pobreza, con poca abundancia, y con humildad.
Hay canciones, hay memes, hay chistes que hacen menos a esta comida. Ahora parece que han insultado el mayor tesoro nacional. Esto solamente demuestra que se buscaba cualquier pretexto para volcar el odio e intolerancia.
