La historia de Áurea Vázquez Rijos, una ex reina de la belleza, que supuestamente ofreció tres millones de dólares al ejecutor de su esposo en 2005 y durante años estuvo fugada en Europa parece estar más cerca de su descenlace.
El truculento hecho que parece salida de los más oscuros libretos de telenovelas, comenzó hace 13 años, en el bello Viejo San Juan, el casco histórico colonial de la capital de Puerto Rico.
Una noche de septiembre, Adam Anhang, expareja de Vázquez, fue golpeado con un adoquín en la cabeza. Después le metieron varias puñaladas con un cuchillo de cocina hasta morir.
Unos días antes, Anhang le había dicho a un amigo en un correo: «Estoy un poco asustado».
El empresario canadiense Anhang tenía 32 años y un patrimonio de 24 millones de dólares en ese entonces.
Hacía seis meses que se había casado con Áurea Vázquez Rijos. Áurea: natural de la isla, ganadora de Miss Puerto Rico Petite. Hoy, acusada de contratar a un sicario para matarlo.
A juicio
Recientemente, comenzó la selección del jurado. En el banquillo: Áurea Vázquez Rijos, su hermana, su cuñado como cómplices y El Loco, que asegura que le prometieron tres millones de dólares que nunca vio.
La fiscalía acusa a Vázquez Rijos, de 38 años, de orquestarlo todo por dinero.
Y es que, Anhang y ella habían firmado un acuerdo prenupcial por el cual la esposa recibiría más capital como viuda que como ex.
Atroz y digno de telenovela
según la investigación, la noche que murió el empresario, había ido a cenar con ella con la idea de dejar acordado el divorcio. Sin saberlo, había sellado su suerte.
Pabón lo asaltó, le ordenó que le diese el dinero y lo atacó. Según un testigo, Áurea se quedó a un lado mirando, sin gritar, sin intervenir.
Desangrándose en el piso Anhang, el supuesto atracador le dio un golpe a ella en la cabeza con el adoquín antes de irse. «Para que pareciera real», relata el informe del FBI citado por Global News. Ni se preocupó de robarle la cartera.