En febrero, Liga Skromane, nacida en Letonia pero residente en Dublin, Irlanda, llegó a una ciudad India para combatir su depresión, en uno de los centros más populares de rejuvenecimiento curativo en la región de Kerala, sin imaginar que no volvería a salir de ahí.
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La mujer de 33 años llegó con su hermana Ilze, con quien a los días de llegar a la ciudad fue a una playa, de donde inexplicablemente desapareció.
Andrew Jordan, su pareja, inició una búsqueda desesperada para encontrar a Skromane, pensaba que había sido secuestrada para extraerle sus órganos y venderlos en el mercado negro.
«Caminé por esas calles y hay una gran posibilidad de que haya sido secuestrada. Hay un conocido tráfico de órganos en ese país a través del mercado negro», le dijo Jordan al diario irlandés Sunday Mirror.
Dos meses después, el 20 de abril, el cuerpo de la mujer fue hallado sin vida y en estado de descomposición avanzado.
Según la policía, Liga Skromane fue asesinada por dos hombres que la violaron previamente.
La hipótesis de la muerte
Liga fue interceptada por dos narcotraficantes locales, que le ofrecieron o la obligaron a consumir algún tipo de droga. Luego la violaron y decapitaron, para luego abandonar su cuerpo colgado de un árbol por los tobillos.
Así estuvo a merced de las bestias durante un tiempo indeterminado. Cuando lo encontraron, justo el día del cumpleaños de Ilze, estaba irreconocible.
Su hermana y otros conocidos la identificaron por los restos de las ropas que aún conservaba.
Los presuntos atacantes, que ahora están bajo custodia, son traficantes de drogas locales. Según los informes, uno tiene antecedentes de abuso sexual de hombres y mujeres.
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