Los casos de las mujeres embarazadas a las cuales asesinaron para después robarles a sus bebés han revivido la realidad detrás de la venta de recién nacidos en el mercado negro.
Aunque se trate de una actividad ilegal, en México la trata de personas y la venta de menores por Internet, a precios que llegan alcanzar los dos millones de pesos, dependiendo del sexo, edad y origen.
En este tétrico negocio, existen acuerdos previos, cláusulas o pagos de mantenimiento hasta que llega el día de entregarlo. Existen muchas jóvenes madres que, ante la falta de recursos o un embarazo no planeado, dan a su hijos en adopción, pero cuando se trata del mercado, los tratantes roban a los niños e incluso los sustraen del vientre de la madre con una violencia salvaje.
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De acuerdo con la Fundación Nacional de Investigación de Niños Robados y DesaparecidosUn bebé recién nacido puesto en el mercado negro tiene mucho más valor debido a que son ofrecidos a las parejas que desean adoptar niños de forma más inmediata y sin el extenso papeleo y «peros» de la vía legal. Por un bebé llegan a pagar hasta dos millones de pesos.
Esta es una situación que se vive en todo el mundo, junto a la venta de órganos, pero en México, es cada vez más alarmante por la forma en la que se lleva a cabo la sustracción de bebés, pues se combina con el término «feminicidio». La vida de las mujeres embarazadas, en especial aquellas que están más avanzadas o que recientemente sieron a luz, es la que peligra.