PIURA, Perú.- Un hecho de parricidio mantiene conmocionados a los peruanos. Un hijo envuelto en celos asesinó a puñaladas a su madre, quien habría confesado ser infiel a su padre cuando era pareja.
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El abominable episodio se vivió días atrás en la localidad de Piura, en Perú. El joven ha confesado fríamente su crimen y admite que fue cegado por los celos y cayó en un estado de descontrol.
La madre asesinada ha sido identificada como Blanca Celi Hidalgo y tenía 59 años de edad, pero no fue la única agredida, pues su hijo menor, también ha sido agredido por su hermano adolescente.
“Yo me llené de odio y de celos por todo lo que mi mamá nos había hecho. Ella comenzó a gritar y empezó a salpicar bastante sangre y automáticamente perdí el control y empecé a apuñalarla por donde le cayera. Por querer agarrar nuevamente el cuchillo, ella se escapó con dirección hacia la calle”, confesó el hijo de tan sólo 15 años.
Las autoridades policiales consideran que en esta primera etapa descrita por el menor de 15 años, la víctima recibió 15 puñaladas. Tras el escape, el adolescente siguió a su madre hasta alcanzarla y continuar con su propósito.
“Cada vez que gritaba, me desesperaba más. Luego salió mi hermano que estaba durmiendo y lo apuñalé también cuando se desesperó”, confesó el menor.
Quien argumentó su asesinato con sentimientos de celos y venganza en nombre de su padre ya muerto, víctima de la infidelidad, según publicó Ojo.
Sin embargo, las autoridades policiales no están satisfechas con la confesión del hijo, pues según explicaron, en una de las manos de la madre había cabellos largos. Esto podría inducir en la escena del crimen a otra persona.
Además explicaron que la hoy occisa presentó fuertes golpes en la cabeza, como si la hubieran azotado contra la pared. Consideran que aún hay detalles del asesinato que los testigos y familiares no quieren confesar.