El cuerpo humano es todo un misterio. A pesar de que la medicina se dedica a su estudio, hay muchas cosas que nos cuesta entender y que suceden porque el cuerpo es así, sabio e intrigante.
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¿Qué pasa cuando interactuamos con los demás? ¿Las sensaciones que tenemos con nuestros padres son las mismas que se desencadenan con las caricias de un tío, hermano o amiga?
De eso se trata justamente un nuevo estudio que fue publicado en el diario online Proceedings of the National Academy of Sciences; de las diferentes áreas del cuerpo y la intimidad que tenemos con las personas.
A través de una gráfica, se muestra la “topografía del contacto social”, una especie de mapa sobre cómo reaccionamos dependiendo de quién nos toque.
Los autores del estudio explican que existen “caricias buenas” y “caricias malas”. Luego de observar y estudiar a 1.368 personas de cinco países distintos, se concluyó que hay áreas del cuerpo que están directamente relacionadas con el tipo de relación o cercanía social.
Cada participante del estudio tuvo que seleccionar un color para cada área del cuerpo que permitirían que otras personas tocaran, y mientras más oscuro era el color, mayor resistencia existía a las caricias.
Quizás pensemos que este estudio no nos aporta muchas novedades, claramente no nos gustaría que un desconocido tocara ciertas áreas de nuestro cuerpo. Sin embargo, hay información que vale la pena recalcar.
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Por ejemplo, el sexo de la persona muchas veces puede ser determinante. Por lo general, las mujeres demostraron mayores “índices de tocabilidad” con sus cercanos, o sea, somos “más de piel” que los hombres.
Cuando se trata de extraños, hombres y mujeres sienten incomodidad, sobre todo en la zona íntima y en las piernas. Sin embargo, cuando el desconocido es de sexo femenino, hombres y mujeres se sienten menos incómodos que cuando el extraño es de sexo masculino.
Todos tenemos zonas tabú, esos sectores del cuerpo que sólo permitimos que toque nuestra pareja. Se puede dar entre amigos, pero el índice de incomodidad se acrecienta, sobre todo en los hombres.
