Hay personas que aman las familias grandes. Un ejemplo más que claro es el de de Annegret Raunigk, una profesora alemana que, a sus 65 años, decidió que quería tener otro hijo.
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Podríamos pensar que quizás quiso hacerlo porque ha tenido muchos problemas para quedar embarazada, pero la realidad es totalmente contraria. Annegret es madre de 13 hijos, el mayor tiene 44 años y la menor, sólo 9.
Según fuentes del diario alemán Bild, la menor de las hijas de esta mujer dijo que quería tener otro hermanito o hermanita, y por esta razón Annegret se hizo una inseminación artificial para lograr embarazarse nuevamente.
Ahora, le quedan dos meses para dar a luz a los cuatrillizos que espera, y sin importar los claros riesgos que tener hijos a los 65 puede implicar, ella dice que no está preocupada y que está feliz con lo que está viviendo.
Si todo resulta bien, Annegret se convertiría en la mujer de más edad que ha dado a luz a cuatrillizos, y según fuentes de Emol, su historia podría ser mostrada en un documental.
A pesar de que su ginecólogo le sugirió “una reducción“, lo que significa que uno o más fetos podrían ser abortados, Annegret se negó y decidió tener a sus cuatro hijos.
Según Daily Mail, Annegret ya había hecho noticia cuando dio a luz a su última hija a los 55 años, y si todo resulta como ella espera, el nacimiento de sus cuatrillizos será un caso que quedará registrado en la historia de la maternidad mundial.
