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La otra vez les conté que ya no hago zapping, sino que veo todo pregrabado. Entonces si quiero poner algún canal no es tan rápido como en una tele normal. Y en la mañana, esos segundos de más se agradecen. Y como me gusta escuchar noticias desde temprano, la radio ha sido la solución.
Ni el cine ni la radio han muerto por la televisión; y esta última se ha convertido en mi compañera feliz por las mañanas. Mi mamá tiene una que le regaló mi tía para su aniversario de matrimonio y la verdad es que nos encanta. La prende cuando se despierta, la lleva al baño y yo me ducho, visto, maquillo y peino escuchando las noticias. Dicen la hora a cada momento lo que me ayuda a no estar nunca atrasada, y amenizan con música.
La verdad no escucho una radio determinada, sino más bien la que agarre señal; eso sí estos últimos días he escuchado la radio Santiago. Quiero cambiarla, pero en el momento es difícil recordar el dial exacto y era que no, dar con él.
Sea cual sea la música que suene, yo la bailo igual. Desde que escucho la radio en la mañana, despierto mucho mejor y ando más informada y bailarina. ¡Puntos para comenzar el día bacán!