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-Desde que empezó el mundial, o tal vez desde que esta selección comenzó a sacarse la camiseta (literalmente), he oído a varias mujeres decir que Gary Medel, el pitbull, es rico o mino. También hay todo un fanatismo femenino exacerbado que rodea a Alexis Sánchez, pero más que por lo “macho”, por lo niño. Quizá el fenómeno se produce porque son futbolistas y siempre existe una especie de morbo hacia los peloteros. Puede ser también porque las mujeres están aburridas de los tipos lindos y buscan a alguien más “rudo”. ¿O será sólo un asunto generacional?
Las que vivimos nuestro paso de la infancia a la adolescencia con “Titanic” y Leonardo Di Caprio, moríamos por el actor. Con el paso del tiempo nos dimos cuenta que el tipo era tan lindo que llegaba a ser feo: muy rubio, muy depilado, muy blanco y de nariz respingada. Los hombres tan perfectos al final no tienen ninguna gracia. Es un poco lo que les pasa a las niñas de hoy que mueren por Jonas Brothers: pelo engominado, pantalones pitillo, chaquetas ajustadas al cuerpo, cremas, perfumes… Como mucho. Esos tipos que tienen más cremas que las mujeres matan la pasión de cualquiera. ¡Cómo se pueden arreglar tanto!
Parece que con el paso de los años buscamos hombres más reales. Esos transpirados, peludos y hasta con guata. O tal vez pasa por un tema generacional y a cierta edad el “metro sexual” se nos olvida y buscamos a hombres del tipo Gary Medel. A él además lo acompaña su fama de “máquina”, así que más llama la atención. Personalmente me encanta Sánchez, por lo simpático y su abdomen espectacular. Si no se arreglara tanto el pelo sería todavía mejor.
Muchas prefieren al hombre, hombre. No al hippie cuico que “se viste” desastroso o que se deja la barba y el pelo largo como parte del personaje, sino a los de carne y hueso, esos de piernas peludas o que parecen recién salidos de la cárcel. Nos llama la atención y nos gusta, como la foto de la selección chilena sin camiseta: llenos de tatuajes. Les pasa sobre todo a aquellas que están rodeadas de niños lindos. Las modelos (las de verdad), por ejemplo, a veces necesitan un respiro y buscan a este tipo de hombres.
Tú qué prefieres ¿Al rudo o al bonito?