En la cocina están siempre presentes, porque agregan un toque de sabor y color a las sopas, además de preparar salsas y guarniciones saludables, como un puré de zanahorias y tomillo.
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Si bien es un ingrediente indispensables, también puede ser un aliado perfecto en la repostería, empezando a probar con unas crujientes y frescas galletas de zanahoria, así aprovechamos su propiedad por excelencia: una buena fuente de betacaroteno, ayudando a nuestro organismo a conservar una piel más sana, terminar con el estreñimiento, y ser un punto a favor en contra de los problemas a la vista.
Estas simples, pero exquisitas galletitas son la forma ideal de esperar la hora del té, con el suave tono naranja de su ingrediente estrella. ¡A cocinar!
Porciones|18 a 20
Ingredientes
- ⅓ de taza de mantequilla
- ⅓ de taza de azúcar
- 1 huevo
- ½ taza de zanahorias cocidas y trituradas
- 1 taza de harina de trigo
- 1 cucharadita de polvo para hornear
- 1 pizca de sal
- ¼ de cucharadita de esencia de vainilla
Cobertura
- 2 cucharadas de jugo de naranja
- 1 cucharada de ralladura de naranja
- 1/3 taza de azúcar pulverizada
Cómo preparar las galletas de zanahorias
- Mezclar la mantequilla y el azúcar hasta cremar. Añadir las zanahorias trituradas, la harina, polvo para hornear, esencia de vainilla y sal.
- Engrasar una bandeja para hornear. Colocar porciones de la mezcla de galletas en la bandeja, dándoles forma circular con ayuda de una cuchara.
- Hornear durante quince minutos a 180º C. Retirar del horno y deja enfriar.
- Mezclar el jugo con la ralladura de naranja. Agregar paulatinamente azúcar pulverizada, hasta obtener una mezcla pastosa. Untar las galletas con esta preparación y servir.
Fuente: Cocina y Vino