Antes de los huevos, el café y el pan dulce, nuestra tierra seguro también conocía de deliciosas combinaciones para los que comenzaban su día. Lo que seguramente, al menos por pura y morbosa curiosidad se han preguntado: ¿Qué sería? Y más importante qué podría ser en un lugar donde no había ganado, ni tantas otras cosas que hoy en día consideramos fundamentales para un buen desayuno (sobre todo los lácteos).
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Pero dejen les digo. En el México prehispánico el desayuno no estaba nada mal servido: este consistía de un atole de amaranto ligero, unos frijoles de la olla con epazote, tortillas de varios colores y salsas de chile tatemado. Para ser honestos, no suena mal. Y siendo aún más honestos, a que se parece al menos un poco a los desayunos que comemos. Aunque nosotros acompañamos normalmente el atole con tamales, y los frijoles con huevo.
La cocina era una parte muy importante de la vida de las mujeres aztecas, quienes pasaban muchas horas arrodilladas ante el metate, ya que no había molinos ni licuadoras. Era tan importante ser buena cocinera, que cuando una niña nacía, su cordón umbilical se enterraba bajo el metate para que esto sucediera.
Por suerte ya no tenemos que hacer eso, ni tenemos que ser buenas cocineras, porque hoy en día muchos hombres se adentran a la cocina. Lo que si tienen que hacer es probar el rico atole de amaranto que además tiene un buen número de beneficios para la salud y creo es una genial manera de comenzar el día.
Tiempo de elaboración | 40 minutos
Dificultad | Fácil
Personas | 2
Ingredientes:
- 1 taza de agua o leche
- 1 taza de amaranto
- Miel para endulzar o piloncillo
Cómo hacer atole de amaranto
Tuesta el amaranto en una sartén a fuego bajo. Coloca el agua a calentar en una olla, por separado la leche también. Muele en la licuadora el agua con el amaranto tostado. Añade la mezcla de amaranto a la leche caliente y mueve hasta que espese.
Añade la raja de canela y endulza con el piloncillo.
Aunque en el México prehispánico no había leche ni azúcar, molían en metate y desayunaban atole.
Y claro, para preparar lo demás también les tenemos lo necesario:
Cómo hacer frijoles
Tortillas amarillas y azules
Ensalada de chiles y piña
Ahora, que si no te dan demasiadas ganas de preparar el desayuno prehispánico tú mismo, hay varias partes de la ciudad de México a donde puedes acudir para disfrutar algo similar: el mercado de Xochimilco, el mercado de la Merced o el mercado portales.
¿Cuál es el desayuno tradicional en tu localidad?
Fuente: Proyecto Indie food