Ya no aparece ninguna publicidad ni en la televisión, ni en la radio y menos en la prensa. HidroAysén, el emblematico proyecto que considera cinco centrales hidroeléctricas sobre los ríos Baker y Pascua en la Patagonia, modificando uno de los parajes más pristinos del mundo, ha quedado congelado.
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Desde que el “hecho esencial” fue enviado por Colbún (49% de participación) a la Superintendencia de Valores y Seguros con la sugerencia de congelar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la línea de transmisión, dado a que el Estado de Chile no tenía una política clara para hacer frente a proyectos de esta envergadura, y a pesar de que el gobierno de Sebastián Piñera se comprometió a enviar al Congreso el proyecto de Carretera Eléctrica Pública en septiembre de 2012 y de las declaraciones de Endesa (51% de participación) de la continuidad del proyecto, se ha reducido el personal en la zona y suspendido el contrato con la consultora perteneciente al consorcio australiano de ingeniería GHD, que ha participado tanto en la socialización como en el diseño del EIA de la línea de transmisión.
Además, redujo su personal, lo que quiere decir que las promesas de becar y generar empleos para los habitantes de las provincias de Capitán Prat y Coyhaique, también quedarán congeladas. Se alcanzó a realizar el taller más importante para la concreción del proyecto. 27 personas fueron capacitadas en tronaduras y explosivos, para que socaven la tierra donde fueron “nacidos y criados” pudiendo posteriormente inundarla con el agua que cambiará el curso de los ríos Baker y Pascua. Quedaron en el tintero los más amistosos: Electricidad Domiciliaria, Mantención Áreas Verdes y Viveros, además de Carpintería en Terminaciones, entre otros.
Esto sucede luego de varios embates que comenzaron desde su anuncio. Protestas multitudinarias en todo Chile y el mundo, constante fiscalización que sacó a la luz diversas irregularidades en el proyecto, la prohibición que la Corte Suprema le dio a la DGA para la utilización de aguas de Parques Nacionales en hidroeléctricas, y por supuesto la congelación indefinida de Colbún en la participación del proyecto.
Para la construcción de HidroAysén se deben inundar 6 mil hectáreas, en las cuales se encuentran tres Parques Nacionales: Parque Nacional Laguna San Rafael, Parque Nacional Bernardo O’Higgins y la Reserva Forestal Lago Cochrane, zonas protegidas por el Estado de Chile, el cual al ratificar la Convención de Washington, vuelve inconstitucional la inundación de estos lugares. Por eso resulta una buena noticia para todos quienes piensan que hay que proteger a la naturaleza.
Ciertamente muchos se alertarán, como lo hizo la editorial de El Mercurio profetizando apagones e inestabilidad social por desaprobación de proyectos energéticos, sin embargo esto proviene de la decisión de las empresas accionistas. Además, quienes creen que el apremio eléctrico se hará crítico pueden comenzar a calmarse ya que según un catastro de la consultora Systep en base al SETA actualmente existe una inversión de más de US$28.000 millones en centrales eléctricas, lo que significan 17.278 Mw, duplicando la capacidad por la aprobación de varias centrales.
El problema es que muchas de ellas son en base a carbón, algo bastante peor producto del tremendo daño tanto a la salud de las personas como a los ecosistemas. Podemos decir que la matriz energética chilena a sufrido una carbonización; un 63% de la demanda es cubierta por energía sucia.
AES Gener, es la compañía con más plantas de energía en base a carbón, la cual contó como alto ejecutivo al actual Subsecretario de Energía, Sergio del Campo, que fue de manera interina Ministro del Medio Ambiente, y que declaró oficialmente hace un mes que no es interés del gobierno cambiar la ley vigente de Energías Renovables No Convencionales. Sencillamente lamentable.
El proyecto HidroAysén comprende:
- 18.430 GWh será la producción eléctrica anual del complejo Hidroaysén cuando esté operativo.
- 820 kms. Es la extensión estimada de la línea de transmisión de Hidroaysén hasta Puerto Montt. 160 kilómetros serían submarinos.
- 5.910 Hectáreas son las que serán inundadas por el proyecto hidroeléctrico. Esto es inferior a las 8.000 hectáreas que inunda el embalse Rapel.
- 2.750 MW Es la potencia máxima instalada que tendrá el complejo hidroeléctrico una vez que esté operativo en la Undécima Región.
La cronología del proyecto:
- 1892 Es el año en que se realizaron las primeras exploraciones en los ríos Baker y Pascua, encargado por el gobierno de la época
- 1940 Se retoman los análisis, esta vez, centrados en la generación eléctrica. La anterior tenía fines de definición de límites.
- 1975 Comienza a desarrollarse el proyecto definitivo, de la mano de Endesa.
- 1998 Se actualizaron los estudios del proyecto, diseñándose un complejo de 2.800 MW.
- 2004 Endesa Chile, ya bajo el paraguas de Endesa España, actualiza los estudios, dando inicio a la sociedad Hidroaysén.
- 2006 Se conforma la compañía Hidroaysén, mediante un joint-venture entre los dos socios principales de la iniciativa: Colbún (que aportaría con parte del capital) y Endesa, que además pondría los derechos de agua
- 2007 Se presenta a tramitación el proyecto Centrales Hidroeléctricas de Aysén, que considera la inundación de 5.910 hectáreas.
- 2011 El proyecto es aprobado por la autoridad ambiental, aunque sólo en lo relacionado con la construcción de las centrales, no de la línea de transmisión.
- 2012 El EIA de la línea de transmisión, que iba a ser enviado a la autoridad ambiental, es postergado para fines del año.
- 2012 Colbún, uno de los dos socios, pide postergar todos los estudios, pues observa falta de condiciones para ejecutarlo.
Fuente: HidroAysén paralizado. Suspende el contrato a consultora y reduce su personal en la región (Terram)